Por: Mario Sotelo
5 personas fallecidas, 5 desaparecidos y 3.549 evacuaciones debieron realizarse durante las últimas 2 semanas producto de la emergencia nacional ocasionada por el intenso temporal que azotó al país.Los datos fueron compartidos por la Presidenta de la Cruz Roja Costarricense (CRC) Dyanne Marenco, como parte de la rendición de cuentas tras la atención por los efectos indirectos del huracán Rafael y la tormenta tropical Sara en territorio nacional.
Indica Mantenco que las cifras son preliminares debido a que la emergencia sigue en desarrollo.
“Esta emergencia aún no termina”, indicó la máxima representante de la institución benemérita, quien aseguró que ahora sigue la etapa de reconstrucción de los sitios más afectados producto de las fuertes precipitaciones.
En tan sentido, se atendieron 777 emergencias, de las cuales 723 fueron por inundación y 54 por riesgo de deslizamiento.
La representante agregó que durante la atención de la situación climática hubo vehículos oficiales de la Cruz Roja Costarricense, que experimentaron desperfectos mecánicos; así como también hubo sedes en el Pacífico en las que las instalaciones de la benemérita también experimentaron problemas de inundaciones.
Los fallecidos por esta emergencia son: -Menor de 3 años que murió tras caerle un terraplén en La Unión de Cartago. -Joven estudiante de la UCR a quien le cayó un árbol en la facultad de derecho.
-Trabajador de la Heladería POPS al que le cayó un árbol cuando iba en carretera, en Upala. -Hombre al que lo arrastró un río en Playa Potrero.
-Menor de 9 años al que lo arrastró un río en Guácimo.
Marenco precisó que hubo más de 4.000 atenciones médicas, siendo las más frecuentes los casos traumáticos producto de lesiones de piel o fracturas.
La Comisión Nacional de Emergencias (CNE) bajó el nivel de alertas durante este lunes: naranja para la región del Pacífico, verde para el Caribe Sur y amarilla para el resto del territorio nacional.
La Cruz Roja precisó que en los próximos días se tendrá que realizar la evaluación de diagnósticos en los diferentes sectores como vivienda, agro, turismo y otros.